Viviendo sanamente
Consigue apoyo si eres un cuidador
Lo básico
Resumen
Cuando estás cuidando a un ser querido, es importante que te cuides a ti mismo también. El estrés físico y emocional de ser un cuidador puede causar problemas de salud. Por eso, busca el apoyo que necesitas para cuidar tu propia salud.
¿En qué consiste ser cuidador?
Un cuidador es una persona que ayuda a un miembro de la familia, amigo o vecino que está enfermo o que tiene una discapacidad. El cuidador informal o la persona que cuida a otro miembro de la familia a menudo le ayuda a su ser querido con las tareas básicas diarias.
Se puede considerar que eres un cuidador si le ayudas habitualmente a alguien a:
- Hacer las compras del supermercado y cocinar
- Hacer los quehaceres de la casa
- Vestirse
- Tomar sus medicamentos y llevar un registro de ellos
- Hacer cuidados médicos, por ejemplo, mantener limpia una herida o aplicar una inyección
- Transportarse. Por ejemplo, llevarlo en auto a sus citas y compromisos
- Coordinar servicios personales, como hablar con sus doctores o pagar las cuentas
Aproximadamente 1 de cada 5 adultos en los Estados Unidos es cuidador. La mayoría de los cuidadores tienen, además, otros trabajos, y 1 de cada 3 pasan por lo menos 20 horas a la semana cuidando a un ser querido.
El estrés de ser cuidador
El estrés de ser cuidador puede causar problemas de salud.
Cuando estás cuidando a un ser querido puede ser difícil cuidar tu propia salud. Los cuidadores corren más riesgo de enfermarse, como de resfriado o de gripe. También tienen más probabilidad de presentar problemas de salud a largo plazo, como artritis, diabetes o depresión.
Podrías tener estrés de cuidador si:
- Te sientes enojado o triste
- Sientes que cuidar a tu ser querido es más de lo que puedes hacer
- Sientes que no tienes tiempo para cuidarte
- Duermes demasiado o muy poco
- Notas un cambio en tus hábitos alimenticios
- Pierdes interés en las cosas que antes disfrutabas
Averigua más sobre el estrés del cuidador (en inglés).
La buena noticia es que puedes reducir tu riesgo de presentar problemas de salud si te cuidas y buscas apoyo.
Toma acción
Salud física
Cuida tu cuerpo.
Ser cuidador puede ser estresante. El estrés puede causar problemas como dolor de espalda y dificultad para dormir. Si te cuidas, tendrás la energía y la fortaleza que necesitas para afrontar las exigencias de cuidar a otra persona.
Aquí tienes algunas maneras de cuidar tu cuerpo:
- Come alimentos saludables para mantener tu cuerpo fuerte. Los alimentos saludables te ayudarán a protegerte de las enfermedades del corazón, del debilitamiento de los huesos y de la presión arterial alta. Aprende a comer saludable.
- Mantente activo para que tengas más energía. Intenta hacer 150 minutos a la semana de actividad aeróbica moderada, como caminar rápido o bailar. Y trata de hacer actividades de fortalecimiento muscular por lo menos dos días a la semana. Averigua cómo mantenerte activo.
- Toma medidas para prevenir el dolor de espalda, como mantener la espalda recta y doblar las rodillas cuando levantes cosas pesadas. Consigue consejos para prevenir el dolor de espalda.
- Asegúrate de dormir lo suficiente. La mayoría de los adultos necesitan dormir 7 o más horas todas las noches. Aprende cómo dormir lo suficiente.
Salud mental
Cuida tu salud mental.
Es importante que también cuides tu salud mental, por ejemplo, controlando el estrés. Aquí tienes algunas formas de cuidar tu salud mental:
- Busca maneras de controlar el estrés. Puedes empezar haciendo unas cuantas respiraciones lentas y profundas. Obtén más consejos para aprender a controlar el estrés.
- ¡Haz algo en tu propio beneficio! Dedica tiempo todos los días para hacer algo que te guste. Por ejemplo, intenta leer, escuchar música o hablar con un amigo.
- Pídele a un vecino que visite a tu ser querido mientras sales a caminar.
- Busca el apoyo de otras personas para que te ayuden a lidiar con el estrés emocional de ser cuidador.
También puede ser útil escuchar a otras personas que cuidan a un ser querido: sus experiencias podrían ser similares a las tuyas. Lee estos relatos de otros cuidadores (en inglés).
Busca apoyo
Pide ayuda.
No necesitas hacerlo todo tú solo. Pídele a tu familia, tus amigos y tus vecinos que te ayuden con las tareas de cuidador.
Además, hay servicios profesionales y de voluntarios que te pueden ayudar. Por ejemplo, tu puedes:
- Consultar estos servicios comunitarios para adultos mayores y cuidadores (en inglés), como servicios relacionados con transporte, comidas y programas de apoyo para los cuidadores
- Buscar servicios de alivio en tu zona (en inglés) que te permiten descansar un poco de la labor de cuidador
- Aprender sobre los servicios y grupos de apoyo para los cuidadores de los veteranos de guerra (en inglés)
Si cuidas a una persona que tiene la enfermedad de Alzheimer:
- Busca recursos para cuidadores de personas afectadas por la enfermedad de Alzheimer
- Llama a la línea de ayuda de la Asociación de la Enfermedad de Alzheimer a cualquier hora del día, al teléfono 1-800-272-3900.
Además, es buena idea averiguar sobre cómo prepararse para las necesidades de cuidados de la salud en el futuro.
Si te sientes agobiado, habla con tu doctor sobre la depresión.
Última revisión del contenido: 29 de septiembre de 2023
Especialista que revisó la información
Esta información sobre el apoyo para los cuidadores se adaptó de materiales de la Administración de Asuntos sobre la Vejez y de la Oficina para la Salud de la Mujer.
Revisado por:
Greg Link
Director de la Oficina de Servicios de Cuidadores y Apoyo
Administración de Vida Comunitaria/Administración de Asuntos sobre la Vejez